Thursday, August 24, 2006

Triple Gordo:

Se puede establecer como una certeza, siempre a medias en este país, que lo que se ofrece como actuaciones por parte de los agentes políticos en conflicto, tiene como visión y meta única el proceso electoral de diciembre. Por eso ante el desplante del gordo, plagado de incoherencias y lugares comunes idiotas de discurso agotado, los dirigentes del comité directivo nacional de la acción democrática roja decidieron no comentar el berrinche, que por lo poco que vi parecía un performance que buscaba imitar al lado femenino del presidente, con histeria incluida, porque y cito: ¨No conviene porque estamos en campaña electoral¨. Pero quizás ante tanta ineficacia, la pataleta del burgomaestre tiene como interés (si nos atamos a la tesis de que existe planificación en el MVR) el generar, o el despertar mas bien, a la bestia dormida que en abril de 2.002 nos llevó a punta de violencia e irreflexión a plantear una guerra entre hermanos en defensa de la educación, la propiedad privada y la libre empresa, que últimamente y si somos capaces de recordar, no cesa como argumento en labios de quienes nos mandan. Podría ser otra cortina de humo, para que nuestros estimados periodistas repitan hasta la saciedad que estamos ante un gobierno forajido y ellos contesten que de forajidos porque cuentan con el apoyo popular y de allí a nada conclusivo. Y lo peligroso es, que aparte de sembrar el miedo para tapar al caos, restrinjan la aplicación de derechos civiles que permitan exigir al estado, como ente administrativo, el cumplimiento de las garantías de seguridad, alimento, vivienda y salud, que por estos bares se evita porque supuestamente no tenemos ¨un estado de derecho¨. Parecen acciones impulsadas para sembrar las bases de un conflicto, agrandado artificialmente, que permita instaurar un régimen de restricciones con la excusa de proteger los intereses colectivos. Para muestra, y pido que lean con cuidado lo siguiente, para así evaluar lo que pasa y que posiblemente sea la excusa constitucional para bloquear alcantarillas, pensando que con eso la basura desaparecerá por confinarla bajo tierra, aquí les va: ¨Se califican expresamente como tales las circunstancias de orden social, económico, político, natural o ecológico, que afecten gravemente la seguridad de la Nación, de las instituciones y de los ciudadanos y ciudadanas, a cuyo respecto resultan insuficientes las facultades de las cuales se disponen para hacer frente a tales hechos. En tal caso, podrán ser restringidas temporalmente las garantías consagradas en esta Constitución, salvo las referidas a los derechos a la vida, prohibición de incomunicación o tortura, el derecho al debido proceso, el derecho a la información y los demás derechos humanos intangibles.¨ Señores ante esto podemos estar y lo que arriba leyeron no es otra cosa que la definición constitucional de los estados de excepción y al parecer, es lo que se busca con los acontecimientos recientes (incluida la fuga) para perpetuar a la especie revolucionaria. Por cierto, durante la vigencia del decreto de estado de excepción se restringe - ¿temporalmente?- el derecho al sufragio.

Tuesday, August 22, 2006

La bendición de comer:

Ya no lo hago con la frecuencia de antes, cuando desde el centro me dedicaba a perder algunas horas caminando desde la esquina de Pajaritos hasta Chacaito, pasando, voluntariamente, por el Bulevar de Sabana Grande. La pauta era simple, forzar la marcha que me llevaba en descenso por la Avenida Universidad, que por efectos de capricho se transformaba al andar en la Avenida México, hasta llegar al Parque Central en donde mis pasos me llevaban a contemplar Picassos, gracias al apoyo de una marca de cerveza; por tanto y para hacer honor a los benefactores de la alta cultura (como si la misma sufriera de escalas) me tomaba una fría al lograr salir del laberinto que forma el Museo de Arte Contemporáneo. Luego el impulso cultural me llevaba a las librerías de la señora pianista y a la del ateneo, para continuar la lectura de libros que por su precio no tienen cabida en mi biblioteca, y después de un breve vistazo a folletos con imágenes de mujeres desnudas, la rutina me llevaba a contemplar por algunos minutos al precursor disfrutando en prisión de cierta libertad intelectual. El detalle es que el camino, como si de una peregrinación se tratara, ofrecía tal cantidad de detalles visuales que impedían observar el entorno que se deterioraba bajo la perplejidad de los gigantes de piedra que cuidan el Parque. Por lo que ayer, me dispuse a recorrer el paisaje mirando al frente, para observar el reto que se presenta para quienes consideran que es posible rescatar espacios conquistados por seres que al cobijo de la informalidad, conviven en una sociedad paralela, con sus propias normas de seguridad, de respeto comercial, de atención alimenticia y en fin, respirando el aire que se comprime por efecto de ocupar el lugar hasta limites imposibles (si se planifica al menos). Lo primero que se observa es que existen normas no escritas pero que se conocen, que permiten disfrutar de mínimos lugares para comerciar artículos que por magia aduanal llegan a puerto gracias al contrabando, la mayoría de los locales-formales- impiden por medio de carteles el uso de baños públicos, por lo que irremediablemente la vía se convierte en depósito de desechos humanos, se observa además una red de seguridad, que junto a la presencia de policías expertos en atender el desorden y el caos – cobrando tributo claro- permiten mantener el ataque delictivo dentro de parámetros aceptables. Cada cuatro horas, un ejército de proveedores atiende el apetito de la masa con ofertas gastronómicas aplastadas en envases de aluminio, y es allí cuando se percibe que la libertad se obtiene al esclavizar la vida a cambio de comer. El desorden esta reglado, los habitantes de ese pueblo dominado por el capitalismo revolucionario entienden que lo que se presenta día a día es una bendición que permite sustento de familias, a quienes solo se pide que se vote por la revolución para permitir que por medio de la instauración del socialismo del siglo XXI, la ficción de país que allí se vive se mantenga y mas ahora que por efectos de estadística sus habitantes fueron excluidos de la cifra de desempleo. En fin, tremendo reto que tiene el zuliano para que voten por él, con la promesa que el orden destruirá una ciudad informal y arrasará con la ilusión de vivir de quienes no tienen mas que esperar que el carrito de comida les llene el espíritu en horas fijas. Aunque aquí entre nos, no debe haber mayor problema porque eso es competencia municipal.

Saturday, August 19, 2006

En sus marcas, listos….

Sin estar parcializado hacía la llamada candidatura unitaria de oposición, tan fuera de consenso que no merece siquiera las comillas, puedo comentar que la misma ha levantado ronchas en múltiples sectores del país, sobre todo entre quienes sufren la delincuencia y el desorden en una convivencia social llevada a extremos, en donde unos pocos crean zozobra y someten, por la vía de las armas y al cobijo de la impunidad a todos los habitantes de esta tierra. No me molestan los partidos y las agrupaciones políticas que acompañan al hombre del Zulia, y pretender tildarlas como del pasado es tan absurdo como pensar que el partido del pueblo no se transformó, a los ojos de sus dirigentes, en el movimiento quinta republica, tan clientelar, corrupto y burocrático como cualquiera de la época que dice combatir, pero lo que si vale la pena resaltar es la manera como el candidato marca distancia con sus dirigentes, como los observa con una actitud de si te resbalas te quiebro, tan propia de sujetos políticos con ánimos de líder y que según el consejo de quienes saben de eso, es la única manera de enfrentar con éxito al candidato-presidente, cuyo manto de plomo lo hace inmune a el pésimo resultado de su gestión y de los suyos, por ahora. Lo que si es digno de comentar es la declaración de Teodoro (por ser conocido de mi padre, imaginariamente, me permito el tutearlo), quien en un arranque de sinceridad necesaria, haciendo una pausa en la alocada promesa del zuliano de sacarnos a golpes de la pobreza, comentó que la movilización se produjo con personas de muchas regiones del país (con la excusa de ser una candidatura nacional), que matemáticamente es posible vencer en las elecciones de diciembre (si se convence a las personas que ven el esfuerzo unitario como mas de lo mismo), por lo que dice que aún siendo minoría en este momento, es posible conquistar con trabajo y propuestas a los indecisos, por tanto el trabajo político es una alternativa en donde la critica justa (y no exagerada como propuso) es el mecanismo para ofrecer propuestas que intenten vencer a la miseria, a la delincuencia, al desorden, al control de todo el aparato estatal para promover una revolución que pocos entienden (por no tener límite en su explicación) y sobre todo, puso de lado esa absurda aspiración de llevar al voto como formula Rosales-Borges o Rosales-Teodoro, ya que como se sabe la vicepresidencia no es posible decidirla por elección popular, aunque aquí entre nos, debería y como propuesta puede ser considerada para una reforma constitucional, en una carta magna, que lo que necesita es desarrollo y aplicación de leyes que propone y no dejarla a medio camino para que los derechos fundamentales jamás sean aplicados. Pero lo que hasta ahora se puede apreciar es que la distancia entre ambos candidatos (descartando a quienes no tomo en cuenta por puro interés subjetivo, y no pido disculpas por eso) se puede reducir hasta llegar a un punto en donde las ideas puedan ser tomadas en cuenta y la elección se centre en evaluar quien es mejor y por que. Yo por mi parte quisiera que Rosales moviera los labios y Teodoro se expresara, solo para poder seguir el proceso desde una óptica sensata, apartando del camino a promesas que suenan bien, pero gastadas al estar pendientes desde siempre.

Wednesday, August 16, 2006

Tregua:

Esta mañana me enteré que la tranquilidad volvió, que los sobresaltos que la interrumpieron fueron solo efectos aislados (de hechos planificados) que por si solos no fueron capaces de romper con un vinculo que va mas allá de la relación profesional. Para bien del afectado, la situación se resolvió al firmarse un documento, que más que ventajas y reconocimiento por labores realizadas, más bien parece una tregua. Porque las partes en conflicto, que fueron responsables directas de las daños causados, a quien sin saberlo era obstáculo de decencia en el transito por una carretera que por usada la conozco por medios propios y por otras referencias, decidieron evaluar, luego de ataques proyectados, la mejor forma de resolver un conflicto sin recurrir a la solución salomónica, en donde nadie gana y el botín se pierde. Pero este cese al fuego y de hostilidades, que es como ahora se conoce a la guerra, está pactado a tiempo determinado, con fecha de caducidad y ojala me equivoque pero el acuerdo firmado es solo correr la arruga para enfrentar consecuencias mas adelante, en un futuro difuso, pero con espacio suficiente para recoger los corotos y permitir que otros paguen por los platos que ya se rompieron y que por terquedad, por ceguera vinculada al cariño, negamos la realidad para salvaguardar lo único que queda, a la esperanza. Por eso es que ahora la vigilia debe ser permanente, la guardia debe ser redoblada, porque como en la muerte, en días de fuga, la misma tiene el número tres pintado en la frente.

Wednesday, August 09, 2006

La cordura como condimento:

La cordura es tan ajena a nuestro transitar como nación que cuando se presenta, así sea por instantes y aderezada con aliños que al comerla probablemente nos caiga pesada, debemos aplaudirla. El acuerdo que nos impone un candidato único de oposición, asado al calor de las brasas de los cocineros de siempre, que se atribuyeron la representación de quienes adversan al régimen, tiene una falla de origen que puede ser superada si en los meses que quedan, antes de la cita de diciembre, podemos conocer los ingredientes de la receta que en teoría dará de comer a todos los venezolanos. Particularmente pienso que otro conejo en el horno permite comparar la sazón que se ofrece en al menos dos opciones, aunque el plato que se tiene como nuevo esté cocinado a temperaturas altísimas, que producen el resultado con gran rapidez, pero que tal y como en las preparaciones novísimas al hidrogeno, puede lograr partidarios en esta extraña forma de consumir alimentos cuyos ingredientes han sido maltratados en nombre de la evolución. Lo que hay que evitar es el guiso y la promoción del restaurante con argumentos fraudulentos, que persigan atraer comensales a una mesa que tiene el mismo mantel blanco de hace unos años. Ya la oferta inicial infiere que la carta es de imposible cumplimiento. Lo del guiso merece ampliar la reflexión, porque en un pueblo donde todos aspiramos a comer sin trabajar, el gusto por este tipo particular de cocedura ya traspasó el ámbito culinario y se ubicó en una forma de vida, permitida y aplaudida por los vivos que aún creen que la pobreza es una enfermedad, que por ser contagiosa basta excluir a quienes la padecen para evitar el contagio, cuando la verdad es que por estos bares ya es una epidemia. Al hablar que debemos evitar el guiso en genérico podemos concluir, utilizando el lenguaje popular, que lo que debemos combatir es las ganas que tienen los fulanos pactantes de estropearnos, que gracias a la pasividad de la mayoría realizaron el conclave que eligió a nuestro supuesto salvador (se mantiene la tesis del Mesías). Yo aplaudo el acuerdo, aunque discrepo en sus formas, porque lo que ofrece es la oportunidad de un enfrentamiento en paz, en donde espero fluyan las ideas, y en donde los ciudadanos, reducidos a electores, elijan al caballo menos malo en un país en donde la silla y la carrera las lleva el jinete. Como dicen por ahí, los conejos persiguiendo a lo zorros, pero ahora parar mitigar el hambre.

Tuesday, August 01, 2006

Descarte y fuera:

El problema se presenta cuando creemos haber identificado al enemigo que hace días cubría su anonimato por medio de interpuesta persona con acento paisa. La pregunta que cabe en este enredo es ¿Qué tal si nos equivocamos?, si otorgamos la responsabilidad de un acto cobarde a quien por razones de estrategia nos ha desplazado para consolidar el control de un grupo que por razones de criterio debe desaparecer. Que tal si acortamos camino y la trocha nos lleva a pensar en la venganza como método de rendición inmediato, sin dar la pelea, sin descubrir el por que del alejamiento que padecemos y que pretendemos justificar al mirar sobre el hombro y encontrarnos con la imagen del progreso a nuestra costa. Peor aún, si aprovechando contingencias, realizamos un ejercicio que al llevarnos al pasado reciente nos ubica en la incomoda posición de haber trabajado pa´ lapa y que al descubrir que a nuestro alrededor el triangulo de poder crece solo en los lados que al unirse se hacen punta, dejando de lado a la base a la que pertenecemos, y este crecimiento irregular nos aleja de los beneficios de un supuesto trabajo colectivo. Si al despertar de esta conspiración tenemos la sensación de no haber sido bien retribuidos y que el impulso hasta mejores horizontes era una ilusión que se alimentaba exclusivamente cuando todos éramos pobres. En fin, parece muy sencilla la solución, que confirma sospechas de quienes por efectos de deslastre ya no nos acompañan (y me incluyo en la rareza de la afirmación) y que sufrieron la distancia en proyectos que hace nada eran comunes y que ahora al intentar subir de triple a hasta grandes ligas nos vemos en la incomoda postura, razonable en el mundo comercial, de convertir el plural en singular para que la meta sea disfrutada individualmente. Lo extraño es que quienes palmeaban nuestra espalda, en este momento incomodo, puedan ser corresponsables de tan disparada petición, que busca sacarnos de donde ya no estamos, que intenta impedir que reivindiquemos lo que no nos pertenece, que solicitemos la protección de derechos ajenos, y que en definitiva evitemos preguntar por nuestro bisabuelo, al que nunca hemos prestado atención por efecto de recuerdos que no existen. Raro, si, sospechoso, quizás, el punto es que la amenaza ausente de hombría a despertado a la curiosidad y ahora hasta tengo ganas de profundizar para intentar llegar a los culpables y lo pienso hacer para descartar en este complot a la primera persona del verbo, en otras palabras para descartarme a mi. Salud señores y cuídense que ahora les toca a los tupamaros.